"Los días pasan, la vida pesa, o puede que solo sea algo en nuestra cabeza, pero, el tiempo parece que pasa deprisa en este invierno adelantado. El sol se esconde antes, como con miedo; mientras la noche se hace dueña de nuestras horas, de nuestras vidas por un momento. Por que estamos añorando aún hoy aquellos días de noches de calor humano que ya no volverán, si es la puta vida, que sigue. Y mi habitación, que se convierte en un quebradero de pensamientos que se escapan en la noche, por la ventana, en forma del vaho, o en la escritura. Escondidos bien al fondo, para que cuando cualquier persona lea las letras de cada texto no encuentre los pensamientos de los que hablo"
No importa nada de esto, mientras niños sigan en parques, jugando a que un día sean adultos con miles de problemas, como los tuyos y los míos; con tu forma de pensar de la vida o de la mía. Te puedes parar en el banco de un parque a mirarlos como corren, como hacías tu aún hasta hace poco.
Miras a la izquierda a aquel grupo de pequeños, y enfrente, un grupo de ellos con un par de años mas; aunque eso no impide a los pequeños levantar la mano y defender al mas pequeño de su grupo. Mírate reflejado en cada uno de ellos, no olvides que llevas dentro una parte de niño todavía en ti.
Es extraño ver el mundo extraño, pero a veces pasa.
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